Durante el proyecto, se ha diseñado, construido y operado un prototipo en dos instalaciones europeas con distintas fuentes de biogás para validar la tecnología y demostrar su solidez en diferentes condiciones.
Los resultados del funcionamiento en ambos emplazamientos se han utilizado para recopilar información valiosa para transferir la tecnología a otras instalaciones similares. Además, se ha validado un modelo matemático (con datos de funcionamiento del prototipo) para permitir el escalado para plantas industriales.